En principio puede parecer que insertar una imagen en Photoshop arrastrándola es algo muy sencillo. Pero pasan muchas cosas en Photoshop durante este proceso. En este tutorial aprenderás qué posibilidades tienes para exportar en Photoshop y cómo puedes integrarlas en tu flujo de trabajo.
Puedes insertar una imagen en Photoshop de varias maneras. Tanto si insertas una imagen simplemente arrastrándola, como si la transfieres desde una base de datos de fotos como Lightroom, tus imágenes siempre se exportarán con la máxima calidad que ofrezca la imagen. El problema es que esto no es ninguna garantía de que la imagen vaya a ser nítida. Por ello, existe una posibilidad de examinar los datos de la imagen mientras se importa.
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Insertar imagen en Photoshop arrastrándola
Como ya hemos mencionado, importar arrastrando es la forma más sencilla de importar imágenes en Photoshop. Solo tienes que abrir el programa y arrastrar tu imagen desde tu explorador o tu escritorio sobre la interfaz del programa. En el momento en el que sueltes el botón izquierdo del ratón, la imagen se abrirá como un nuevo documento. El documento en el que se encuentra la imagen tiene exactamente las mismas medidas y configuraciones que las que tiene la imagen de por sí. Aquí se incluye, por ejemplo, la resolución, la anchura y la altura, así como el modo de color utilizado.
Para comprobar las informaciones de la imagen, haz clic en el menú superior en Imagen y luego en Tamaño de imagen. Con las informaciones en este panel puedes ver claramente la calidad general de la imagen. En este ejemplo, la imagen tiene una resolución total de 3042 x 4563 px, o bien 107 x 160 cm. Estos valores son el requisito perfecto para, por ejemplo, preparar la imagen para su impresión.
Insertar imagen en documentos ya existentes
Al igual que en el primer ejemplo puedes, arrastrando y soltando, importar la imagen en un documento ya existente. En el caso de que, tras ser importada, la imagen no se muestre a toda la anchura y la altura del documento, sino solo en parte (ver imagen), este es un primer indicio de que la imagen recientemente importada es demasiado pequeña para ser escalada al tamaño del documento. Y es que, al importarla en un documento ya existente, la imagen se inserta también con la máxima calidad de la que dispone.
Sin embargo, es posible que el aviso no se confirme y que sí sea posible escalar la imagen insertada. Aunque, para poder hacer una valoración correcta, aún te faltan las informaciones de la imagen recientemente importada. Si vuelves a hacer clic en Imagen y luego en Tamaño de imagen, solo verás las medidas y la resolución del documento, y no de la nueva imagen.
En estos casos, Photoshop te ayuda con los llamados objetos inteligentes. Cuando importas una imagen en un documento ya existente, Photoshop lo convierte inmediatamente en un objeto inteligente. Esto lo puedes reconocer en el pequeño icono de fichero directamente en la miniatura de la capa. Si haces aquí un doble clic, la imagen recientemente importada se abre como documento independiente pero asociado, y aquí tienes de nuevo la posibilidad de comprobar la información de la imagen en Imagen y Tamaño de imagen.
Consejo: puedes realizar todos los cambios que desees en el objeto inteligente en el documento abierto, por ejemplo, la coloración o retocar la imagen. Si, después de la edición, guardas el documento con la combinación de teclas Ctrl + S, puedes cerrarlo y los cambios se llevarán a cabo igualmente en el documento original. Encontrarás más información al respecto en nuestro tutorial sobre objetos inteligentes.
Importar imágenes desde Lightroom
Otra posibilidad para insertar imágenes en Photoshop es utilizar Lightroom como banco de imágenes e importarlas desde allí. De esta forma, no necesitas guardar las imágenes en tu ordenador, sino que puedes utilizar el almacenamiento en la nube de Adobe y así ordenar tus fotos de forma clara.
Para importar desde Lightroom debes primero abrir el programa y hacer clic en el símbolo + en la esquina superior derecha. Selecciona entonces en tu explorador la imagen que quieres insertar y, a continuación, haz clic en Revisar para importar. Para transferir la imagen a la nube de Adobe, haz clic a continuación en la parte superior derecha en Añadir imagen. En la esquina superior derecha verás entonces un pequeño icono de una nube con un círculo azul que da vueltas. En el momento en el que este desaparezca, significa que tu imagen se ha subido con éxito a la nube y puedes recuperarla con Photoshop.
Para ello, abre Photoshop y haz clic en el menú de inicio en la pestaña Fotos Lr. Aquí puedes ver una lista con las fotos que ya han sido añadidas y, cuando hagas clic en el botón Actualizar, se cargará la nueva versión de tu banco de imágenes y podrás ver la imagen recientemente subida. Si quieres abrirla, márcala haciendo clic con el botón izquierdo del ratón y elige Importar selección. A continuación, la imagen se descarga localmente y puede ser editada como de costumbre.
